Las exportaciones y las importaciones en China disminuyeron en enero y febrero en comparación con el año anterior, lastradas por la baja demanda externa y un empeoramiento de la situación sanitaria, mientras las tensiones con Estados Unidos persisten.
En enero y febrero, las exportaciones de China volvieron a caer (un 6,8% interanual), según las cifras en dólares publicadas este martes por las Aduanas chinas. En diciembre, habían registrado una bajada del 9,9% internaual.
Las importaciones también se contrajeron en enero y febrero (-10,2% internaual), según la misma fuente. En diciembre, habían caído un -7,5% respecto a diciembre de 2021.
En cuanto al excedente comercial de China, en enero y febrero (sumados) alcanzó los 116.800 millones de dólares (unos 109.200 euros). En diciembre, fue de 78.000 millones de dólares.
La amenaza de la recesión en Estados Unidos y en Europa, sumada a una inflación galopante, contribuye a que la demanda internacional de productos chinos disminuya.
Además, China levantó en diciembre el grueso de sus medidas contra el covid-19, que lastraban la actividad económica del país desde hacía tres años. La decisión hizo que mucha gente enfermara, lo que perturbó la producción y las cadenas logísticas en enero.
En un contexto de tensiones geopolíticas con Estados Unidos, las exportaciones chinas a ese país registraron una caída interanual del 21,8% en enero y febrero. Un año antes, en ese periodo, reflejaban un alza del 12,3%.
Las importaciones chinas procedentes de Estados Unidos, bajaron un 5% en enero y febrero.